Mordazas para bondage
fantasia erotica con mordazaLas mordazas son uno de los complementos para bondage que mas llama la atención, el hecho de tapar la boca a la otra persona, ahogando en cierta medida sus gemidos y viendo como su saliva clara y brillante humedece la comisura de los labios es algo que puede excitar mucho.

Los aficionados al bondage suelen usar la mordaza durante cualquier fantasía donde quieran castigar o someter, por ejemplo cuando van a dar unos azotes. Es una manera mas de limitar a la otra persona, de dominarla y someterla a tus voluntad.

Solo tienes que dejar volar tu imaginación y te vendrán a la mente diversas situaciones o fantasías en las que te podría resultar excitante usar una mordaza. Si quieres añadir aún mas morbo prueba combinando una mascara con mordaza, el hecho de tapar los ojos cambia bastante la situación.

A la hora de comprar una mordaza para bondage es importante prestar atención a los detalles, no solo a la estética. Por ejemplo, cuando se trata de una mordaza de bola debes saber el tamaño, no vaya a ser que no te entre en la boca o te resulte demasiado grande.

mordaza abierta con pinzas para pezonesOtro aspecto importante es el material de la mordaza, si solo va a tapar la boca da un poco igual, pero si la idea es que sea un aro que abra la boca o una bola que tendremos dentro durante un rato lo suyo es que sean materiales de calidad como látex, silicona o metal.

Quizás la silicona sea el mejor material, ya que no es tan blando como el látex ni tan duro como el metal, no es poroso, no produce alergias y además no huele a nada.

Tipos de mordaza

En cuanto al estilo de mordaza, ya hemos mencionado algunos, pero por hacer un breve repaso podemos mencionar las mordazas con máscara, las mordazas de bola, mordazas de ganchos, mordazas abiertas con anilla, mordazas con pinzas para pezones, o mordazas con pene.

Lo ideal es comenzar con algo cómodo y que no resulte demasiado intimidante, si la experiencia os gusta siempre podéis ir a mas. Además conviene estar sentado o de pie mientras llevamos puesta la mordaza para evitar que la acumulación de saliva sea un problema.