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El sexo anal puede ser una experiencia muy placentera si se hace con cuidado, pero también puede ser realmente doloroso y traumático si no se toman las medidas adecuadas. En este artículo, repasamos 15 consejos básicos que te ayudarán a hacer del sexo anal algo realmente agradable y sensual, sin los problemas que típicamente se le asocian:

Lubricante: así como la vagina lubrica, el ano NO. Deberás usar lubricante y estar atento a que no se seque, ya que podría ser doloroso. En cuanto a lubricante se refiere, nunca es demasiado.

No te creas lo que sale en las películas. Esto no es llegar y meter. Hay que hacer un trabajo previo de dilatación y esto serán varios días, dependiendo de cuánto tiempo estéis y cada cuánto sean las sesiones. Por favor, olvídate de lo que ves en las películas porno.

Paciencia: puede salir al primer día, la primera semana, el primer mes … e incluso existe la posibilidad de que realmente no lo consigáis nunca. En todo caso, paciencia.

El sexo anal no tiene porque ser doloroso. Eso es mentira. No «duele un poco y luego te gusta». Si se hace con paciencia y delicadeza, debería ser una cosa gradual y perfectamente indolora.

Es muy importante conseguir un ambiente relajado para la ocasión. El sexo anal no es algo que pueda intentarse en un calentón. Prepara música, pon unas velas, algo de incienso si es que te gusta y, sobre todo, mucho mucho mucho juego previo (caricias, besos, …).

Comunicación: debéis hablar de intentarlo. Tenéis que estar seguros de que conocéis los pasos a dar y, ante todo, debe existir la absoluta seguridad de que no se forzará nada. Al más mínimo dolor, se para. La comunicación es importante no sólo antes del sexo, sino también durante – para asegurarte de que todo va bien, y después, para saber qué le ha gustado, qué podríais intentar otro día, si le ha gustado o no …

Infórmate: hay numerosas páginas web con información al respecto de este tema. Lee y aprende. Discute lo que aprendas con tu pareja.

No intentes meter el pene de buenas a primeras. Primero mete un dedo, juega con el ano hasta que se acostumbre, haz circulitos con él. Luego mete otro y repite la operación. Cuando metas tres, ya lo has conseguido. Siempre recuerda usar lubricante.

Puedes ayudarte de algún juguete para dilatar el ano. Que no sea demasiado grande. Prueba por ejemplo a estimular la vagina y el ano al mismo tiempo (lengua y dedos respectivamente, o con un vibrador). Querrá repetir seguro.

Todos los juguetes deberían ser impregnados con lubricante, y esto también incluye los dedos.

Si vas a meter un dedo, puedes usar guantes satinados de los que usan los urólogos/ginecólogos. Esto evitará que claves alguna uña. El ano es muy sensible y aunque a ti te parezca que las tienes perfectamente cortadas, es posible que hagas una buena algarada sin quererlo.

La higiene normal es suficiente para tener sexo anal. Salvo que se tengan ganas de ir al baño no habría ningún problema. Eso sí, tened en cuenta que puede haber pequeños trocitos de heces que acaben saliendo al exterior, así que es aconsejable poner una toalla debajo para no manchar las sábanas.
Preservativo, no solo en el pene sino también en cualquier juguete (entran mejor y son más fáciles de limpiar).