Un poco de historia…
La palabra dildo está descrita en el Diccionario Webster como «un objeto que hace de substituto del pene para la penetración vaginal». Su etimología es desconocida pero se le dio esta denominación en el siglo dieciséis. Algunos creen que se deriva de la palabra italiana «diletto» que significa complacer. Sin embargo, los dildos se usaban ya en la Antigua Grecia, cuando las mujeres solteras usaban el «olisbos», un substituto del pene hecho de madera y que lubricaban con abundante aceite de oliva. Los asiáticos también utilizaban juguetes sexuales por lo menos desde hacía 1000 años. En el Oriente Medio antiguo usaron dildos fabricados con boñiga seca de camello recubierta de una resina resistente. Según esto el dildo tiene entonces una historia muy antigua y ha sido usado para la misma función básica desde tiempos muy lejanos.

El dildo moderno
Los dildos se asemejan a los vibradores, la diferencia está en que éstos no vibran. La mayoría tiene forma fálica, aunque no todos. Populares hoy en día son los que se parecen a un pene real, están hechos de materiales que intentan simular la piel, asemejándose a la textura y color del pene, incluso vienen con testículos. Los dildos o consoladores están hechos de distintos materiales, como plástico, silicón, látex, material gelatinoso e inclusive de vidrio. Vienen en distintos colores, formas y tamaños.