Las bolas chinas y el suelo pélvico

Las bolas chinas y su acción positiva sobre el suelo pélvico

L&S.- Las bolas chinas, lejos de ser un mero juguete sexual se han convertido en un valioso dispositivo terapéutico altamente valorado por los profesionales de la salud en la corrección y prevención de problemas en la musculatura del suelo pélvico.

Las bolas chinas – Un buen método preventivo

Según estudios científicos realizados en los últimos años, las bolas chinas terapéuticas son dispositivos mecánicos que si son fabricadas en silicona médica no entrañan ningún riesgo, y sí grandes ventajas en corregir y prevenir los problemas  que pueda causar la falta de tono en la musculatura del suelo pélvico.  Sexólogos, ginecólogos y fisioterapeutas alrededor del mundo ya están recomendando bolas chinas terapéuticas o ‘ejercitadores pélvicos’ como se empeñan en llamarlas a mujeres que acaban de dar a luz a fin de que su suelo pélvico vuelva a su sitio, y a mujeres que sufren incontinencia urinaria o prolapsos. Es una manera eficaz y barata de solucionar un problema muscular, que hasta hace muy poco tiempo, sólo se solucionaba en el quirófano, o usando compresas grandes. Basta con tenerlas puestas media hora o una hora (en caso de conseguirlo) al día.

¿Qué es el suelo pélvico?

El suelo pélvico es una red de músculos y ligamentos igualmente importantes en la anatomía femenina, como de la masculina debido a que cierra la pelvis por debajo manteniendo en posición correcta la vejiga, el útero, la próstata y el recto. Esta musculatura es también la encargada de mantener abiertos o cerrados los esfínteres y su debilidad o flaccidez dan origen a escapes involuntarios de orina, los cuales pueden llegar a evolucionar hasta convertirse en la temida incontinencia urinaria y prolapsos en la vejiga, el ano y en el recto.

El suelo pélvico también se relaciona con la sexualidad, pues un buen todo muscular en el suelo pélvico va a producir mayor sensibilidad en la vagina y por tanto un mayor placer en las relaciones sexuales. En esto las bolas chinas tienen un beneficio incalculable, además de ser una ayuda en corregir los problemas de incontinencia urinaria y prolapso.

El suelo pélvico y las disfunciones

Cuándo los músculos pélvicos se  hacen laxos los órganos que están sujetados por esta masa de músculos se posicionan mal. Eso es lo que da lugar a los prolapsos, la incontinencia urinaria, problemas intestinales, disfunciones sexuales, vaginismo, relaciones sexuales dolorosas, etc.

Los primeros síntomas de que hay problemas de suelo pélvico son pequeños escapes de orina al saltar, bailar, estornudar, reírse, levantar peso, etc.

En cuánto a las relaciones sexuales, el tono muscular del suelo pélvico laxo provoca una insensibilidad vaginal provocando anorgasmia, o falta de intensidad en los orgasmos.

Disfunción del suelo pélvico ¿A quién afecta y cuáles son sus causas?

Según las estadísticas, un suelo pélvico debilitado causa problemas que sufre -en mayor o menor medida- un tercio de las mujeres adultas a nivel mundial. El que los músculos del suelo pélvico estén laxos es fácil de entender ya que la zona pélvica no se expone al ejercicio diario de forma natural y espontánea. Ahí es donde entran las bolas chinas terapéuticas. Estas consiguen un ejercicio constante e involuntario. Son los ejercicios de Kegel, pero sin la incomodidad de tener que dejar de  hacer las labores para dedicar un tiempo a los ejercicios, ya que se realizan por acción de las bolas chinas y el resultado es es mucho más intenso y provechoso.

Unidades de suelo pélvico que recomiendan las bolas chinas

El suelo pélvico se debilita por diferentes causas, aunque lo que casi siempre coincide son: la edad, partos múltiples, la obesidad, el estreñimiento crónico, algunos deportes, enfermedades respiratorias crónicas, un amala nutrición, el sedentarismo, la falta de relaciones sexuales, etc. lo que provoca una enfermedad imposibilitadora, que es la incontinencia urinaria 8entre otras consecuencias. La repercusión social es tal, que ya existen unidades especializadas en la salud y el tratamiento del suelo pélvico. También se realizan congresos médicos monotemáticos de las disfunciones pélvicas. Todos ellos coinciden con la efectividad del uso de las bolas chinas terapéuticas debido a los buenos resultados de su experiencia.

¿Qué son las bolas chinas terapéuticas?

Las bolas chinas fueron creadas con fines lúdicos (juguete sexual), pero al observar la fortaleza que aporta a los músculos vaginales y a la zona pélvica, se han derivado a un uso terapéutico, siendo fabricadas  una bolas chinas mucho más suaves y pequeñas y elaboradas con materiales médicos altamente respetuosos de la integridad de los tejidos de la vagina.

Son dos bolitas. Una dentro de la otra. La interior es metálica y vibra con el movimiento (andar, correr, etc.) y esa vibración, provoca una intención de retenerla para que no se caiga, estimulando directamente la musculatura perineal y vaginal. Hay una variante que solamente es un abola densa, pero esa no es la recomendable. Tiene que ser la bola china que dentro tiembla otra bolita con peso y movimiento propio.

También se han fabricado otras variantes más sofisticadas, aunque no es en absoluto  necesario gastar más dinero. Las bolas chinas terapéuticas dan excelente resultado.

¿Cuáles son los beneficios de las bolas chinas?

Favorecen la recuperación de la musculatura pélvica previniendo la incontinencia urinaria y preparando para el parto. También ayudan a cerrar la vagina estimulando sensaciones eróticas perdidas por la flacidez.

¿Cómo se utilizan las bolas chinas?

Higiene: Antes de utilizar por primera vez las bolas chinas se deben lavar muy bien y esterilizar, hirviéndolas durante 10 minutos en agua limpia. Se recomienda su esterilización de vez en cuándo durante su uso.

Cada vez que se guarden, se deben lavar con jabón neutro y secar muy bien antes de guardar en su bolsa de algodón. No se deben guardar húmedas. Piense que la vagina es un lugar muy sensible y es fácil que las infecciones proliferen. Para conseguir  una limpieza efectiva, hay un spray limpiador respetuoso del material de las bolas chinas que resulta muy cómodo de usar.

Elija solamente bolas chinas de uso terapéutico y no de ‘las otras’

Deben estar diseñadas para fortalecer el suelo pélvico y no para uso lúdico y hay que cuidar que no estén fabricadas con materiales porosos, ni tenga relieves en que pueda esconderse suciedad. También es importante que las bolas chinas estén libres de ftlatos.

Es importante tener muy claro que las bolas chinas terapéuticas son de uso individual. Jamás se deben prestar

Forma de colocarlas: Ponerlas es fácil. Se aplica un poco de lubricante vaginal y se introduce en la vagina hasta que quede detrás del músculo que cierra la vagina, como si se tratara de u n tampón, dejando poro fuera el hilo de arrastre que lleva para ser retirada después. Al principio, puede que las bolas chinas nos parezcan demasiado grandes, pero se introducen con mucha facilidad.

Cuándo nos ponemos de pie, las bolas chinas empiezan a caer con su propio peso y a producir unos  pequeños temblorcillos y es entonces, cuándo notaremos las contracciones que se produce dentro de la vagina para mantenerlas dentro. Es una contracción absolutamente inconsciente para evitar su caída. Las bolas chinas son las pesas con que el suelo pélvico se ejercita.

Las bolas chinas terapéuticas son más efectivas si se usan estando en movimiento. Su utilización deberá ser progresiva, empezando con 15 minutos diarios para ir poco a poco incrementando el tiempo que estarán puestas. Se debe conseguir mantenerlas durante una hora entera estando en movimiento.  Si siente que una hora es demasiado, con usarlas media hora sería suficiente.

Cada mujer tiene una musculatura diferente y necesitará tiempos diferentes para fortalecer sus músculos pélvicos. A medida que se fortalezca el suelo pélvico, podrá ir aumentando la exposición al peso, e incluso poner mayor resistencia con más gramaje.

Los ejercicios que provocan las bolas chinas consiguen que en poco tiempo, el suelo pélvico reaccione fortaleciéndose y viéndose los resultados.

Es posible notar agujetas cuándo se usan. Eso es totalmente normal al ejercitar un músculo. Si vemos que eso ocurre, se dejan de usar unos 3 días, para volver a ponerlas. Se va observando. A lo mejor, necesitamos ir más despacio subiendo el tiempo.

Cuándo se haya conseguido mantener durante una hora entera las bolas chinas con facilidad, podemos pasar a hacer otros ejercicios. Intentaremos mover dentro la bola contrayendo la musculatura de la vagina. Es divertido y muy eficaz. Puede llegar a desplazarse las bolas chinas a lo largo de la vagina. Para hacer esto, es preferible tener dentro una sola bola.

Si al estar de pie, es imposible sostenerlas, o usarlas, hay un amanera de empezar: para hacer el ejercicio de Kegel sin estar de pie con las bolas chinas es estando en estado acostado y las bolas chinas terapéuticas introducidas, tiraremos de la cuerda con la mano y resistiremos para que no puedan salir con la vagina en una especie de  pulso con nosotras mismas. Eso ayudará a fortalecer los músculos. Al principio costará, pero llegarán a sostenerse sin problema estando de pie.

Las bolas chinas deberíamos utilizarlas a diario (en lo posible) durante 3 o 4 meses. Después de eso puede dejar de ejercitarse, aunque lo ideal es seguir siempre. Si para, pasado un tiempo  debería volver a hacer su rutina pélvica, a fin de que la musculatura se mantenga siempre en perfecto estado.