Bolas chinas – De juguete sexual, a terapia indispensable
Las bolas chinas, lejos de ser un mero juguete sexual han pasado a ser un instrumento terapéutico muy valorado por los profesionales de la salud en la corrección y prevención de problemas en la musculatura del suelo pélvico.
¿Qué es el suelo pélvico?
El suelo pélvico es una red de músculos y ligamentos que cierran la pelvis por debajo manteniendo en posición correcta la vejiga, el útero, la próstata y el recto.

La musculatura del suelo pélvico es la encargada de abrir y cerrar los esfínteres y cuando estos se debilita se producen escapes de orina que progresan hasta la incontinencia urinaria y prolapsos (vejiga, útero, recto). Respecto a la sexualidad un buen tono muscular favorece la sensibilidad vaginal y el placer.

El suelo pélvico y las disfunciones.
Cuando se laxa la musculatura de la zona pélvica se ocasiona una mala posición de los órganos a los que sujeta y puede derivar en incontinencia urinaria, prolapsos (vagina, útero y recto), disfunciones intestinales, disfunciones sexuales como vaginismo, dispaneuría (dolor vaginal durante el acto sexual), etc. Respecto a la salud sexual, un mal tono muscular produce insensibilidad vaginal disminuyendo de la intensidad de los orgasmos, e incluso la ausencia de ellos, etc.
El primer síntoma de alarma suele ser pequeños escapes de orina que se escapan al realizar esfuerzos como levantar algo de peso, unas risas, un pequeño salto o hasta al bailar, hasta desembocar en la incontinencia urinaria.

Disfunción del suelo pélvico ¿a quienes afecta y cuáles son sus causas?
Los problemas causados por la debilidad del suelo pélvico afecta a una gran cantidad de mujeres. Según las estadísticas, un tercio de mujeres sufren algún tipo de disfunción de la musculatura del suelo pélvico.
El suelo pélvico es una zona muscular que no está expuesta al ejercicio natural, es decir, no son músculos que se ejerciten de forma espontánea, por lo que si no hay un ejercicio voluntario, planificado y específico como los ejercicios de Kegel o mediante el uso de bolas chinas, poco a poco va a ir debilitándose más.
Las causas de la debilidad del suelo pélvico son diversas, pero los factores más comunes son: la edad, partos múltiples, la obesidad, un estreñimiento crónico, la práctica de algunos deportes, enfermedades respiratorias crónicas, etc.

¿Se puede tonificar el suelo pélvico?
Hay unidades médicas que están especializadas en el tratamiento del suelo pélvico y congresos médicos que están dedicados a las disfunciones del suelo pélvico exclusivamente. Cada vez hay más estudios centrados en este problema y en las posibles soluciones y especialmente en la prevención.

Hay estudios científicos que demuestran la eficacia de las bolas chinas como método para la prevención y recuperación de la musculatura del suelo pélvico. Sexólogos, ginecólogos y fisioterapeutas de todo el mundo ya las están recomendando. El uso de bolas chinas previene y hasta revierte los problemas causados por la falta de fortaleza en la musculatura del suelo pélvico. Basta con llevarlas puestas media hora o una hora (en caso de conseguirlo) al día.

¿Qué son las bolas chinas terapéuticas?
Las bolas chinas son un invento creado en un principio como juguete sexual, pero que su utilización ha derivado a un uso terapéutico por la fortaleza que aporta a la musculatura de la zona pélvica. Se trata de una o dos bolas unidas por un cordel. Cada bola china lleva en el interior otra bolita que tiembla al andar, correr, etc. estimulando la musculatura por el movimiento que provocan en el interior de la vagina. También existe una variedad que sólo es una bola, pero no son las que se recomienda, sobre todo al inicio de la terapia de ejercicios.

Las bolas chinas se lavan con jabón y se guardan. Son un elemento sencillo. Elíjalas con cuidado. Utilice sólo bolas chinas de uso terapéutico. Deben estar diseñadas para

fortalecer el suelo pélvico y no para uso lúdico y el material no debe ser poroso ni rugoso.

¿Cuales son los beneficios de las bolas chinas?
Tonifican la musculatura perineal previniendo la incontinencia y favoreciendo la recuperación después del parto. Cierran la vagina favoreciendo un aumento de la sensibilidad sexual, estimulan las sensaciones eróticas de la mujer etc.

¿Cómo se utilizan las bolas chinas?Bolas chinas fortalecen el suelo pélvico
Antes del primer uso de las bolas chinas, es muy importante esterilizarlas (aunque seguramente ya vendrán esterilizadas) metiéndolas unos diez minutos en agua hirviendo, esto también es recomendable hacerlo de vez en cuando. Siempre las lavaremos con agua y jabón neutro antes de introducirlas en la vagina y cuidaremos de que nuestras manos también estén limpias. A la hora de guardarlas, una bolsa de tela es lo ideal. No deben ser guardadas con humedad, por eso un saquito de tela puede venir bien y pueda aislarlas de la posible suciedad exterior. Piense que la vagina es una de las zonas más propensas a las infecciones y hongos.

Las bolas chinas no deben prestarse.

La forma de colocarlas es sencilla: se pone un poco de lubricante en la primera bola y se introducen en la vagina hasta quedar colocadas detrás del músculo de la misma forma que un tampón, dejando el cordel fuera con el cual luego se retira. Al principio, puede que las bolas chinas nos parezcan demasiado grandes, pero se introducen con mucha facilidad. Al ponernos de pie, la gravedad hace su trabajo y las bolas tienden a caer, entonces se produce la contracción del músculo de una manera totalmente inconsciente para evitar que la bola china se salga y de esa manera, hacemos ‘pesas’ con el suelo pélvico.
Bolas chinas fortalecen el suelo pélvicoLas bolas chinas se deben utilizar en movimiento para que sean eficaces (correr, andar, hacer ejercicios, etc.).
Su uso debe ser progresivo. Se puede comenzar con 15 min diarios e ir incrementando el tiempo en 15 minutos más cada semana hasta conseguir mantenerlas por una hora aproximadamente. Si una hora es mucho, con media hora sería suficiente. Cada mujer irá adaptándose y a medida que los músculos se fortalezcan podrá aguantar más tiempo. En caso de que tarde más en el proceso, puede seguir con un menor tiempo, hasta que lo consiga. Una cosa hay que tener en cuenta y es que la musculatura del suelo pélvico reacciona con rapidez a los ejercicios que provocan las bolas chinas y en poco tiempo se ven los resultados. Si al pasar de un tiempo a otro notamos molestias del tipo agujetas al día siguiente estaremos un par de días sin utilizar las bolas chinas y luego volveremos al tiempo anterior durante otra semana.
Cuando se ha conseguido llevar las bolas chinas durante una hora sin problemas, entonces sería el momento de pensar en las bolas chinas de una sola bola, con las que contrayendo la musculatura se puede conseguir desplazarlas a lo largo de la vagina.
La forma de utilizar las bolas chinas es muy sencilla. En el caso de que no se puedan utilizar de pie, sí que se pueden utilizar como instrumento para hacer ejercicios con ellas. Estando tumbadas en la cama boca arriba y con las bolas chinas introducidas en la vagina, tiraremos con una mano del cordel de extracción y con nuestra musculatura trataremos de impedir que se salgan. Es una especie de pulso con nosotras mismas que nos ayudará a fortalecer el músculo hasta que puedan sostenerse sin problemas estando de pie.
Podemos utilizarlas todos o casi todos los días durante 3 ó 4 meses y luego ya no las necesitaremos en mucho tiempo, aunque sería recomendable que se siguieran utilizando.
Si usted nota que no las puede sujetar ni estando acostada, pida consejo a un fisioterapeuta especialista en suelo pélvico, pues es posible que necesite fortalecer la musculatura por otros medios.