Sabemos que existen productos tres en uno, cómo el champú/acondicionador/gel, pero ¿lubricantes multiusos? ¡Esto si que es una sorpresa! Leyendo en foros de Internet descubres muchas cosas, y adivina cuál fue nuestro último hallazgo… ¡Infinitas formas de reutilizar el lubricante sexual! A continuación te contamos las 5 formas más creativas. ¡No te lo pierdas!

1. Como bálsamo labial

Al igual que hidrata y humedece tus partes íntimas, el lubricante puede ser el recambio perfecto cuando te quedas sin bálsamo labial. Además, ¿qué mejor que darle a tu chico un pequeño adelanto de lo que vendrá luego por la noche? El beso le sabrá a pura sensualidad…

2. Para arreglar esa puerta chirriante

Cada vez que llegas a casa y abres la puerta, suena ese ruido tan molesto que parece sacado de una película de terror. ¡Tenemos la solución! Utiliza lubricante para engrasar las bisagras de la puerta y, ¡Voilá! Adiós al sonidito infernal.

3. Para sacarte un anillo

Una generosa dosis de lubricante te hará la vida mucho más fácil cuando necesites quitarte un anillo. ¡Una vez lo pruebes ya no querrás hacerlo de otra forma!

4. Para prevenir las ampollas cuando utilizas tacones

¿Sabías que masajeando tus pies con lubricante antes de utilizar tacones previenes la aparición de las incómodas ampollas? Quizá te sentirás algo resbaladiza al principio de la noche, pero te asegurarás de que al día siguiente tus pies estén libres de heridas.

5. Para atrapar insectos

Se acerca el verano, lo que significa que los insectos van a comenzar a hacer su visita anual. Olvídate de insecticidas mal olientes y crea tus propios artilugios para deshacerte de esos diminutos animales. ¡Puedes preparar trampas con lubricante! Esparce el producto en tiras de papel y colócalos cerca de las ventanas, en la terraza o en tu jardín. En cuanto los insectos aterricen en tu trampa, se quedarán pegados a ella y no podrán picarte. ¡Sólo hay un contra para ésta idea tan ingeniosa! Puede que acabes asociando a los insectos con el sexo…